Los préstamos gota a gota ahogan a miles de costarricenses que, por sus necesidades y condiciones de exclusión absoluta del mercado financiero, no les queda de otra que acudir a esa opción para calmar su angustia.
Sin embargo, esto ha desatado una ola de violencia en las calles que tiene con el pelo parado a las autoridades y el principal problema es que actualmente no existe una ley que castigue a esta mafia.
Precisamente, diputados de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico de la Asamblea Legislativa discuten un proyecto de ley para la regulación y sanción de estos préstamos, el 23.575.
Como pena máxima, valoran meterle dos años de tabo al bichazo. Se reformaría el artículo 243 del Código Penal, que establecería la sentencia mínima en seis meses de cárcel y el cambio establecería lo siguiente: “Aprovechando la necesidad económica, estado de pobreza o calamidad social, ligereza o inexperiencia de una persona, le hiciere dar o prometer cualquier ventaja pecuniaria evidentemente desproporcionada con las condiciones del préstamo o la obligare a otorgar garantías de carácter extorsivo”.
Según el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), del 1.° de enero al 31 de julio del 2023 se reportaron 434 extorsiones de este tipo.
El texto del proyecto explica que este delito tiene su origen en Colombia como medio para lavar dinero del narcotráfico y de ahí se fue extendiendo en la región.
En el documento se indicó que en los préstamos gota a gota cobran altas tasas de interés. Por lo general, el ‘prestamista’ solicita pagos diarios, semanales y quincenales, lo que hace muy difícil para la víctima hacerle frente a la deuda; esto lleva a amenazas y, en algunos casos, lesiones y la muerte.
La presidenta de la comisión, la diputada de Nueva República, Gloria Navas, expresó: “Estos delitos son de lesa patria. No es solo un delito contra la paz social. Lesa patria, ¿por qué? Porque si estamos alterando los sistemas económicos, los sistemas bancarios, etcétera, que tenemos en Costa Rica, es toda la patria la que está siendo afectada”.
En la comisión intervinieron otros actores como Mario Gómez, de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC), quien dijo que la raíz del problema es el acceso al crédito: “Si una persona no tiene un instrumento rápido, una forma de accesar rápido a una línea de crédito, esas personas van a caer en manos del gota a gota”.