El gobierno activó el proyecto Marchamo Digital, con el que el popular “impuesto al aguinaldo” o “derecho al ruedo” se pagaría tan sencillo como darle un clic a un botón desde un sitio web o aplicación.
Mónica Araya, presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de Seguros (INS), detalló que se trabaja en la licitación del sistema y que se esfuerzan para que “podamos implementarlo de manera masiva para el marchamo el 1.° de noviembre (del 2023)”.
“A partir de la implementación del Marchamo Digital, los vehículos estarán identificados de manera única por medio de un chip, que remitirá la información hacia un sistema informático centralizado, administrado por el INS. A su vez, esta información podrá ser leída a distancia por equipos especiales de la Policía de Tránsito”, explicó la jerarca.
Araya resaltó que la idea se aprobó en cinco meses, pues se presentó en noviembre del 2022 y el INS ya ha invertido más de ₡600 millones. En caso de que no se pueda realizar en el tiempo previsto también se trabaja en preparar el pago del marchamo de la manera tradicional.
La presidenta del INS explicó que para llevar adelante el proyecto “hemos visto ejemplos y hemos coordinado inclusive con países como México y Panamá, donde la implementación masiva de estas etiquetas han logrado mejorar, inclusive, la recuperación de vehículos robados”.
Nogui Acosta, ministro de Hacienda, expresó que con el Marchamo Digital se termina la incertidumbre de los conductores “para saber cuánto podía pagar” y que con el cambio se reduciría el monto a pagar “en el 92% de la flota vehicular del país y solamente aquellos vehículos de alto valor van a tener que pagar un poco más”. El funcionario fue contundente: “Se tendrá un sistema más justo”.
Acosta no precisó cuánto menos pagarían los usuarios en el recibo.
El presidente de la República, Rodrigo Chaves, enumeró ventajas del Marchamo Digital: “Un solo chip, no va a tener que andar tarjeta de circulación, no va a tener que andar cambiando calcomanías. La calcomanía o etiqueta del derecho de circulación se cambiará si acaso cada diez años, todo recargado electrónicamente”.
“En la segunda etapa, vamos a ver las asociaciones público-privadas para que pueda entrar al parqueo, para que el accionar del Ministerio de Obras Públicas y Transportes y la Policía de Tránsito, cuando haya muchos chips esperando en un semáforo en rojo y del otro lado no haya chips, el semáforo se cambia”, declaró Chaves.