Si algo tenía claro el líder indígena bröran Yehry Rivera Rivera es que la muerte le llegaría de manera violenta. En sus palabras se nota que nunca tuvo miedo.
El primer aviso fue el 1.° de setiembre del 2013.
En un video inédito que publicó la Fundación Gaia en su canal de Youtube se aprecia a Rivera hablando una semana después de haber sufrido un ataque brutal por intentar denunciar una tala ilegal de árboles en territorios indígenas, a escasos 300 metros del liceo de Térraba, en Potrero Grande de Buenos Aires de Puntarenas.
“Recibí un golpe en la cabeza que me dejó inconsciente y 20 minutos después me desperté cerca del Liceo de Térraba con el brazo izquierdo quebrado. Estoy vivo de milagro, no sé cómo más bien no me mataron”, afirmó Yehry en la grabación.
Rivera participó en una disputa por tierras cerca de la comunidad Mano de Tigre de Boruca, en Buenos Aires de Puntarenas, la noche del lunes anterior. Allí lo asesinaron de cinco balazos (hombro, axila, espalda y cabeza).
El Juzgado Penal de Buenos Aires de Puntarenas dejó libres a los hermanos de apellidos Varela Rojas por el crimen. Ellos alegaron legítima defensa en el enfrentamiento, de acuerdo con el medio Santo Domingo Digital.
Esta decisión se asemeja a cómo terminó aquel caso del 2013.
De acuerdo con un informe que la oficina de prensa del Ministerio Público envió a ¡Qué Torta!, la Fiscalía Adjunta de Asuntos Indígenas acusó el 14 de agosto del 2014 a un hombre de apellido Martínez.
En la audiencia preliminar del 24 de marzo del 2015, el Juzgado Penal ordenó que el caso se elevara a juicio, debate en el que la Fiscalía solicitó prisión contra el sospechoso.
El 17 de setiembre del 2015, el Tribunal Penal ordenó la absolutoria del sujeto el 18 de marzo del 2016. Ante dicha resolución, la Fiscalía interpuso una apelación, pero el Tribunal de Apelación la rechazó.
Posteriormente, la Fiscalía interpuso un recurso de casación el 18 de abril del 2016, pero la Sala Tercera no acogió la petición y dejó en firme la absolutoria.
Aquella agresión quedó impune. Habrá que esperar si el crimen también.