Al empleado del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) Pedro Eduardo Calvo Olivares, de 54 años, lo asesinaron de dos balazos en el pecho.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que el cuerpo que apareció en la represa Puente Mulas 1, en Belén, Heredia, la madrugada del pasado 14 de diciembre, es el del trabajador.
Las autoridades identificaron a la víctima por las huellas dactilares y sus dientes.
Calvo Olivares desapareció desde el 3 de diciembre anterior, cuando varios delincuentes se metieron a robar a su casa, en el residencial La Fundación, en Tejar de El Guarco, Cartago.
En varios videos que captaron cámaras de seguridad que tenía el brumoso en su casa se aprecia cómo llega con un amigo y posteriormente cómo le vendaron los ojos y le amarraron las manos hacia atrás.
Así lo sacaron de la vivienda y lo dejaron tirado en una zona montañosa cercana al río Tiribí, en Pavas.
Compañeros de Calvo en el ICE oraron por él en los últimos días para que saliera bien librado de esta situación.