Tambores de golpe de Estado suenan fuerte en el programa De boca en boca, de canal 7, contra el reinado del productor Víctor Carvajal, quien hasta el miércoles anterior creía que podía hacer lo que le diera la gana solo por ser el consentido de Paula Picado, una de las dueñas de la televisora.
El último aleteo del presentador del espacio, que se transmite de lunes a viernes, a la 1:30 p. m., por Teletica, fue echar a Esteban Calvo, parte de la producción del programa y a quien él nombró en ese puesto a mediados del 2018.
Al parecer, entre los dos siempre hubo grandes diferencias y en los pasillos del canal del trencito corre el chisme que Calvo no se le dejaba a Carvajal cuando salía con alguna ocurrencia para incluir en el programa.
Después de que el famoso Víctor (na’ que versh) voló tijera, les tocó el turno de ponerlo en su lugar a los periodistas Rodolfo Rodríguez, Diego Piñar, Allan Andino y Steven Barahona, quienes, cuentan las malas lenguas, se le rebelaron.
O Víctor nombra a un periodista con “callo” en el puesto de Calvo o se queda sin personal para hacer el espacio. Así como se lo contamos está el asunto.
Carvajal mejor no jugó mucho de vivo (como dicen que acostumbra a hacer en el 7), se le bajaron los humos y planteó el tema a recursos humanos del canal.
Habrá que esperar a quién nombran en ese puesto. Lo que sí es cierto es que Victicor anda bien estresadito en estos días y en el elenco de De boca en boca se respira bastante tensión. Como dicen por ahí, “el programa de Víctor”.