El magistrado salvadoreño Eduardo Jaime Escalante, de 50 años, se salvó que un tribunal de ese país lo procesara por el delito de agresión sexual contra menor.
La Cámara Primera de lo Penal de San Salvador determinó que a pesar de que el funcionario restregó la mano en las partes íntimas de una niña, de 10 años, como lo hizo sobre la ropa solo constituye una falta penal de actos contrarios a las buenas costumbres y al decoro público.
Esta resolución indignó al país centroamericano. El presidente, Nayib Bukele, se pronunció contra el fallo y expresó que le da “asco”.
“Aunque se trate de un tocamiento producido en una zona anatómica localizada en la región púbica del cuerpo, si este es de carácter instantáneo, si se produce sobre la ropa de la víctima, aprovechando un descuido de ésta y en un lugar que hace imposible que el grado de invasividad corporal sea mayor por ser un lugar público transitado aún en horas del día; la conducta carece de la gravedad y trascendencia suficiente para lesionar la indemnidad sexual, y en consecuencia no puede ser calificada jurídicamente como agresión sexual en menor”, establecieron los jueces.
La Fiscalía General de El Salvador apelará la sentencia.
Escalante Díaz era magistrado de la Cámara Tercera de lo Civil desde noviembre del 2007 y anteriormente desempeñó el cargo de juez cuarto de lo Mercantil, cargo al que llegó en marzo del 2003, después de ser asistente en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador.
El 4 de marzo anterior lo suspendieron del cargo y le quitaron la inmunidad para que enfrentara el proceso.
La mamá de la niña lo denunció en la delegación de la Policía de Soyapango, comunidad ubicada en la periferia de San Salvador. El hecho ocurrió el pasado 18 de febrero en el barrio Altavista, en el municipio de Tonacatepeque.