La huelga que lastima los centros hospitalarios del país se alargará tres días más, según anunció el Frente Sindical para la Defensa de la Caja Costarricense del Seguro Social.
El movimiento dio a conocer la medida en conferencia de prensa y reconoció que la gerencia de la institución poco puede hacer para resolver el asunto; que los que tienen la papa en la mano, según los dirigentes, son el presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada; la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, y el Ministerio de Planificación. Solo con ellos negociarán.
Aunque los trabajadores defienden varios puntos de las protestas, el más significativo es que se les respete los derechos adquiridos y que la regla fiscal no los afecte.
Esto está directamente relacionado con la publicación del decreto 41729, del 22 de mayo anterior, que especifica una serie de cambios, a partir del 3 diciembre del 2018, en cuanto al otorgamiento de incentivos como anualidades.
Llama la atención que en ese documento se establece que las anualidades que los trabajadores acumularon antes del 4 de diciembre del 2018 y se les reconocen en el salario no se les tocará.
El baile empieza a cambiar a partir de la vigencia la reforma fiscal que aprobaron los diputados, es decir, con las futuras anualidades, porque dependerá que se les conceda de acuerdo con una evaluación del desempeño. Esto por citar un escenario.
Los sindicatos adelantaron que habrá una gran concentración de funcionarios en los alrededores del edificio principal de la CCSS, en el centro de San José, el próximo jueves, a partir de las 9 a. m. El grupo saldrá del parque La Merced.
Los voceros expresaron que los servicios hospitalarios mínimos esenciales no se han dejado de dar como en emergencias, neonatología y cuidados intensivos.
Las autoridades manifestaron que la afectación en citas ha sido enorme y este martes suspendieron casi 4.000.
