Las obras para proteger del fuerte oleaje en la costa el tramo de la ruta 23 que pasa por Caldera, así como las casas, comercios y la escuela cercana ya se terminaron, anunció la Comisión Nacional de Emergencias (CNE). La orilla está protegida con un enrocado en el que se colocaron piedras de hasta siete toneladas.
En junio 2023 el oleaje dañó la barrera y en varias ocasiones inundó tanto la carretera como las casas que se encuentran más cerca del mar. En julio de ese año comenzaron los trabajos para dar una cobertura de 125 metros lineales contra las olas. Primero colocaron 12.500 toneladas de rocas, luego se amplió el enrocado con 40 metros más.
“Con estas rocas, de hasta siete toneladas cada una, se espera que la economía, el comercio y la calidad de vida de las personas se vea beneficiada. Estas obras son un ejemplo de enlace de esfuerzos entre la CNE y la Dirección de Obras Públicas, con la asesoría de la División Marítimo-Portuaria, ambas dependencias del MOPT (Ministerio de Obras Públicas y Trasnportes)”, dijo el presidente de la CNE, Alejandro Picado.
El resultado de la intervención ya se deja ver como lo cuenta Dunia Montero, vecina de la comunidad, “yo veo que están bien las piedras y la gente trabajando… El mar se pone bravísimo y no están esas marejadas porque esto lo ha hecho más fuerte… yo digo que sí están sirviendo las obras”.
La CNE también se ha ocupado de realizar charlas para la comunidad, donde responde las dudas de las personas y les brinda información sobre el comportamiento del mar. Ahí se conformó un Comité Comunal de Emergencias, que luego de una capacitación se unió al programa nacional conocido como Comunidades Pellizcadas.
Las obras en Caldera se financiaron con un aporte de más de ₡745 millones de la CNE.