Guillermo Leonhardes es el primer paciente a quien especialistas del hospital San Juan de Dios intervinieron para colocar en su corazón una válvula que regula el flujo de sangre y regresó a casa la tarde del mismo día sin complicaciones, según anunció el personal del centro médico.
Fue un regalazo doble para su salud y para su familia, porque la operación se la realizaron el 23 de diciembre del 2022, tan solo un día antes de su cumpleaños y de la Nochebuena.
Todo comenzó hace unos meses cuando don Guillermo, de 86 años, sufrió un deterioro en su corazón e incluso un desmayo.
“Venía muy, muy mal, decayendo. Yo no les decía nada a mis hijas para no alarmarlas, pero yo calculaba que no llegaba a fin de año”, aseguró Leonhardes. El 25 de noviembre anterior fue a realizarse exámenes en el Área de Salud de Hatillo y un doctor observó que algo no estaba bien.
Jorge Arauz, jefe de Cardiología del hospital San Juan de Dios, explicó que corría riesgo de morir. El médico reveló que el paciente tenía una enfermedad llamada estenosis aórtica, que se da cuando una de las cuatro válvulas que controlan el paso de la sangre por el corazón no se abre bien y entonces llega menos a las partes del cuerpo que la necesitan.
Arauz y el cardiólogo Jorge Chavarría manifestaron que el procedimiento consiste en colocar un catéter a través de la arteria femoral, cerca de la ingle, y llevarlo al corazón con la válvula. Cuando llega a su sitio se infla un balón para reemplazar la válvula dañada.
Chavarría afirmó que con este método “a las cuatro horas puede estar el paciente recuperándose con nuestro equipo”.
“Normalmente, los pacientes quedan hospitalizados varios días, pero esta vez no fue necesario, hemos implementado técnicas que nos hacen permitir esto a los pacientes”, agregó Arauz. En el caso de don Guillermo, él llegó a su operación temprano el 23 de diciembre y se fue a su casa al final de esa tarde.
La directora del hospital, María Eugenia Bonilla, manifestó que la cirugía ambulatoria ayuda a liberar espacio de camas de hospital para atender a más pacientes. Otra ventaja es que la persona deja de exponerse a riesgos como infecciones al dejar el centro médico y además puede recuperarse al lado de su familia, lo que favorece su salud mental.
Con esta técnica innovadora, don Guillermo celebró su cumpleaños en su casa el 24 de diciembre y la Navidad con su familia. “La operación fue todo un éxito y día con día he tenido una evolución fantástica, satisfactoria, no tengo palabras para dar las gracias”, expresó el abuelito.