Los productores de melón están preocupados por la presencia de un fungicida en la fruta, considerado como cancerígeno, que detectaron las autoridades sanitarias de Alemania en un cargamento procedente de Costa Rica.
Aún así, esta situación tan grave la califican como “un hecho aislado”.
La Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Melón y Sandía de Costa Rica (Canapecu) asegura que se trata de un cargamento pequeño de fruta de uno de 23 exportadores de ambos productos.
Pero la preocupación aumenta porque consideran que se generaliza y afecta “de forma muy negativa la imagen de nuestro país y a un sector que ha sido pionero en la implementación de medidas alternativas a los agroquímicos“.
“No es justo que se generalice por un caso“, reclaman.
Las autoridades sanitarias de Alemania encontraron en el cargamento de melones costarricenses residuos del pesticida clorotalonil, considerado cancerígeno en la Unión Europea (UE), según informó en un reportaje la agencia alemana de noticias Deutsche Welle.
Según el trabajo periodístico, la proporción del agroquímico supera siete veces el límite establecido, pues se detectó 0,08 milgramos por kilogramo de peso (mg/kg), cuando lo que permite la UE es apenas 0.01 mg/kg. La fruta ingresó a Europa por los Países Bajos.
“El ingrediente activo está registrado para uso en plantaciones de melón tanto en Costa Rica como en los países de la Unión Europea, es decir, es de uso restringido, no prohibido en UE”, indica la Cámara a través de un comunicado de prensa.
Los productores le tiran la bola al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) porque afirman que no tiene mayor impacto en asistencia técnica, proceso de control, educación y capacitación sobre agroquímicos y buenas practicas agrícolas.
“Esto, aunado al rezago histórico en el registro de nuevas moléculas más eficientes y amigables con el ambiente ha favorecido el uso inadecuado de los agroquímicos, ya que los productores no cuentan con instrumentos, ni tecnologías accesibles para atender sus cultivos, poniendo en serio riesgo la producción, pero sobre todo la salud de los consumidores”, agregan.