El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, atiende con urgencia el problema de extorsiones telefónicas que se planean desde las cárceles de ese país centroamericano.
El mandatario anunció dos medidas inmediatas que se aplicarán específicamente en la Granja Modelo de Rehabilitación Cantel, en el departamento de Quetzaltenango, al oeste de la capital.
Desde ese centro penal se origina el 47% de las extorsiones, según informó el diario chapín Prensa Libre.
Las autoridades aislarán a los prisioneros acusados por el delito de extorsión; por eso habilitarán 60 espacios donde solo hay una luz y sin tomacorrientes.
Además, se instalará un bloqueador de señal celular para frenar las llamadas de los reos.
Giammattei hizo una visita a esa cárcel y ante la prensa reconoció que si bien es cierto esos aparatos se utilizan desde hace casi ocho años, “no están funcionando a cabalidad”.
“Hace aproximadamente siete u ocho años, las empresas telefónicas pusieron los bloqueadores. En la actualidad tienen contratada a una empresa para que les dé mantenimiento a los bloqueadores en las cárceles”, señaló.
El mandatario indicó que hay una “falta de mantenimiento” de los equipos, por lo que se reunirá con los gerentes de las dos empresas de telefonía que operan en Guatemala para que se resuelva el asunto.
“De lo contrario, vamos a sacar un acuerdo donde quedarán terminantemente prohibidas las antenas de celular cerca de cualquier prisión. La seguridad es primero”, aseguró.
Giammattei se ha concentrado en reforzar los controles en el sistema penitenciario y una muestra es que cambió a directores y subdirectores de las cárceles, quienes pasaron por pruebas de polígrafo y confiabilidad.