Parece que el destino de Jenny María Bastos Soto, de 51 años, estaba escrito desde hace tiempo.
Fue víctima de agresión, de malos tratos y de humillaciones a cargo de su esposo, Elvis Yohanni Bolaños Herrera, de 55 años.
El final: el que, lamentablemente, se impone en la mayoría de los casos. Elvis la asesinó de un disparo en la cabeza y luego tomó la opción más fácil y cobarde; se pegó un tiro en la sien.
La escena la descubrió la hija de la pareja al amanecer de este viernes 7 de junio del 2024, a eso de las 6:30 a. m., en la vivienda del matrimonio, en Sabanilla de Alajuela.
Don Juan Bastos, padre de la mujer, lamentó que su hija esté muerta por “culpa de las leyes”.
Elvis era un hombre violento y la mantuvo en vilo prácticamente toda la vida.
“Había medidas cautelares, no sé si ella lo permitió o él la tenía amenazada, no sé”, confirmó el dolido padre.
Agregó que él también le había puesto medidas cautelares y que tenía más de tres años de no acercarse a la casa de su hija para evitar problemas y “respetar las leyes que nos imponen esas medidas”.
Según el Registro Civil, Bastos y Bolaños tenían 35 años de casados, y además de la joven de 28 años, tenían otro hijo de 36 años.