Michelle Bachelet, alta comisionada de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, les pidió a los gobiernos del mundo que examinen la forma de poner en libertad a los presos más vulnerables ante el COVID-19, como a los de más edad y los enfermos.
Así lo consignó Noticias ONU en su sitio oficial y la funcionaria en su cuenta oficial de Twitter.
Mantener reos en detención durante la crisis del #COVID19 conlleva un alto riesgo y debería ser una medida de último recurso. Con brotes en aumento y un número creciente de muertes en prisiones y otras instituciones en muchos países, las autoridades deberían actuar ahora. pic.twitter.com/tzRB97ZpVi
— Michelle Bachelet (@mbachelet) March 25, 2020
“Mantener reos en detención durante la crisis del COVID-19 conlleva un alto riesgo y debería ser una medida de último recurso. Con brotes en aumento y un número creciente de muertes en prisiones y otras instituciones en muchos países, las autoridades deberían actuar ahora”, tuiteó.
En el reporte informativo de la ONU citan una posición de la expresidenta de Chile que denota su preocupación porque “ahora más que nunca” los gobiernos deberían “poner en libertad a todos los reclusos detenidos sin motivos jurídicos suficientes, entre otros a los presos políticos”.
“En muchos países, los centros de reclusión están atestados y en algunos casos lo están de manera peligrosa. A menudo los internos se encuentran en condiciones higiénicas deplorables y los servicios de salud suelen ser deficientes o inexistentes. En esas condiciones, el distanciamiento físico y el autoaislamiento resultan prácticamente imposibles”, aseguró Bachelet.
Por último, les pidió a los gobiernos que no olviden a las personas que están en hospitales psiquiátricos, hospicios y orfanatos, “porque las consecuencias de su abandono podrían ser catastróficas”.