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Mensaje suicida de cineasta Soley Bernal puso a correr a sus amigos

La cineasta colombo-costarricense Soley Bernal publicó un mensaje en su perfil personal de Facebook que horrorizó a sus amigos más cercanos y los puso a correr.

Fue un texto en el que se despedía de todos, del mundo y de los seres que más ama. Ante esta señal, sus seres queridos llamaron al 911 para alertar sobre un posible desenlace fatal.

La Policía respondió y al llegar a la casa, en Ciudad Colón, la encontraron viva y sana; esto devolvió la tranquilidad.

La más reciente producción de Bernal es la película “Te presento a mi novio”, que se estrenó el pasado 22 de agosto.

Bernal enfrenta una demanda laboral de siete excolaboradores de la cinta por un monto de ¢12,6 millones por aparentes incumplimientos.

De acuerdo con el escrito de la cineasta, se podría interpretar que los problemas legales que ha enfrentado en el pasado y a lo mejor en este momento la impulsaron a hacer la publicación.

La productora también ha dirigido otros proyectos como la miniserie La cualquiera y las películas El lugar más feliz del mundo y Despertar.

Este es el mensaje que escribió Bernal:

(Publicación programada)
Adios a todos.
A lo que me ame y que me amaron gracias.
Nací con el cerebro diferente, sin poder comunicar adecuadamente mis emociones en momentos de peligro.
Sin filtro social para mostrar mis méritos o esconder mis molestias o sufrimientos adecuadamente.
Mis habilidades sociales se limitaron a darle afecto a los que tenían cerca, mi sentido de justicia y compasión no me permitieron despedir a un empleado o colaborador. Cuando trabaje para empresas no fue un problema porque con el tiempo alguien más se encargaba de eso. Pero cuando estuve sola en la calle, no sacar personas tóxicas y peligrosas de mi círculo, eso me expuso a un gran peligro.
A pesar de mi ternura y maternalismo, no pude construir una red social sólida para apoyarme en momentos de peligro, eso requiere más habilidad social. Yo no la tuve.
El aislamiento fue mi amigo. Mi trabajo fue lo único que me ayudó a sobrevivir y llevar una vida relativamente normal y sentirme parte de algo.
Ser así no tendría problema si no hubiera vivido entre depredadores. Yo vivía sola en la selva, hasta que un día mi presencia fue demasiado notoria, hasta ese momento en que un depredador me eligió como presa y fui impotente, no me supe defender y tampoco tenía una manada social para ayudarme. Y de ahí otros depredadores se fueron uniendo hasta que no quedó nada de mi.
Fue así como viví sin saber como evitarlo, caí en sus garras y nada pude hacer. ¿cómo pedir ayuda, cómo sobrevivir a este mundo? Es por eso que ya no estoy aquí.
¿Cómo levantar la voz ante la injusticia?
¿Cómo ser escuchado cuando no hablas el mismo idioma de los demás? ¿Cómo, cómo, cómo? Si no podía salir de mi silencio por miedo a que fuera peor defenderme, con mi acostumbrado discurso infantil.
Nunca gané una pelea social, aunque tuviera la verdad de mi lado, nunca supe usar las herramienta en contra las artimañas de la palabra, que me sobrepasaron.
Gracias a los que en algún momento de mi vida fueron mis protectores en algún trabajo y me ayudaron. Fueron ángeles en mi camino. Dios se los recompense.
El único lugar donde las palabras eran mis amigas era para ser graciosa y pasar como creativa o alocada. Las palabras escritas fueron mi refugio en mis historias donde podía crear mundos con justicia, con retribución, con amor.
Siento, siento muy profundo,
pienso, pienso muy profundo,
pero nada sale bien de mi boca cuando necesito defenderme, ni siquiera puedo ordenar palabras con la fuerza de la verdad, como para salvar mi propia vida, a mi familia del hambre, de la pena, de la miseria. Que impotencia sentí.
La defensa nunca llegó a tiempo, en la única demanda que recibí me están declarando inocente, pero de que vale ya, es muy tarde el daño ya está echo, mi mente se bloqueaba, y mis emociones me inhabilitan, mientras la mentira nunca pudo ser acallada. Corría rápido como un virus. ¿Ahora como se podrá limpiar?
No pondré los nombres de los que me hicieron este mal, porque no tengo su misma maldad, no sería capaz de hacerles lo que ellos me hicieron.
Toda una vida de trabajo y esfuerzo no sirvieron de nada en este mundo tan malvado, donde pesan más las palabras que los hechos.Siempre quise dejar una huella de amor en todos los que conocí, ayudar a todos lo que podía, pero poco importa ya, todo quedó en el olvido, en la memoria de quienes me amaron y me conocieron alguna vez, unas cuantas frases bien articuladas cargadas de maldad pesaron más que lo que fui, falle en mi misión como humana, ¿y los que ni me conocieron? también fui juzgada por ellos por lo que nunca les hice.
Fácilmente mis amigos me dieron la espalda. Fueron jueces despiadados, de lo que nunca se me declaró culpable, me aislaron como a una leprosa pero sin lepra. Ahora les da vergüenza ser mis amigos.
¿Qué es lo que está mal en este mundo? No lo sé.
Los que hicieron daño lo hicieron para ocultar sus propia maldad hacia mi vida, fue fácil devorar una presa que no se defendía, su avaricia desmedida, sus extorsiones, sus robos, su manipulación, su amistad calculada, su traición a una persona inocente que ningún daño les hizo les quedara por siempre en su conciencia.
Mientras pasaba los días cargando una carga que no me correspondía y mientras me hundía sin parar, ellos acechaban entre las sombras, y cuando intentaba ponerme en pie arremetían nuevamente, sumando más maldad a sus tretas. Hasta que ya no me quedó fuerza para continuar.
Los que me llamen cobarde. No se imaginan lo que es tener un cerebro brillante para unas cosas. Pero vivir emocionalmente como una niña de 5 años en el cuerpo de una adulta, luchando contra la maldad de este mundo.
No saben lo que es tener todo en contra. Bajo la sobra acusadora del rumor y de la duda. Muchos se aprovecharon de los rumores para querer sacar su tajada también. Como dicen si una vez la acusaron falsamente de robarse un pan, es fácil acusarla de que se robó un pastel.
Mi corazón está destruido llevo 4 años continuos de sufrimiento, perdí mi casa, mi carro, mi buen nombre, mi salud, las ganas de trabajar, sumergida en medicación y psicoterapia, ahogada de dolor de pedirle a mis amigos más cercanos comida y cosas básicas para subsistir. Mientras otros inventaban que nadaba en oro y en excesos.
Necesito ponerle fin. Basta ya ¿Cómo podría sobrevivir en un mundo así? Cómo sacar las ganas de vivir? Era cuestión de tiempo para que algo así sucediera.
Perdonó a todas esas malvadas criaturas de este mundo frívolo del que no quiero acordarme nunca más.
A mi familia les pido que superen mi partida y sigan adelante. Mi vida se volvió arena movediza entre más luchaba para sacarlos del hueco, se hacía más grande y chupaba todo alrededor. Luche ustedes saben que luche.
Nunca trabaje por dinero, ni por una posición, nunca, solo quería hacer lo que me gustaba. Pero en este mundo así no funcionan las cosas. Maldito el dinero, maldito el ego, maldito el poder. Maldita la envidia.
La gente habla de matones en el colegio, pero ¿quieren saber algo? esas mismas personas algún día se graduarán y saldrán a la calle a seguir lastimando personas y ahí nadie las detendrá.
Continuarán buscando una víctima, la vulnerable, la ingenua, la soñadora, la que no pone límites. Y la hostigarán, le robarán, la aislaran, la desprestigiarán y finalmente la matarán. A la vista y paciencia de todos.
Me odie a mi misma, por no haber podido detener a los abusadores, por no conocer el discurso correcto, por no saber manejar la situación, por dejarme manipular para llevar sola una responsabilidad que no me correspondía, por no poder luchar con las mismas armas.
Solo quiero huir de este planeta, porqué nunca me sentí parte de este mundo, era demasiado malvado para mi, tenía miedo de la maldad de las personas y de ser ciega a las intenciones e intereses de los demás.
Mi vida era tan frágil como quitarle un dulce a un niño.
Solo quiero estar, en un lugar solitario con mucha naturaleza, donde haya una cascada de agua y vivir en una pequeña choza con una camita suave. Rodeada de mis animales, donde pueda escribir y crear sin miedo a nada, donde pueda volver a ver a mi familia a mi esposo y a mi hija y no hacerles daño por ser quien soy.
Los amo, perdónenme hubiera querido ser como los demás.
Espero que lo que me paso sirva para que la gente mida el daño que hace a los demás. Y ayude a las personas que como yo necesitan de más apoyo de la sociedad para tener una vida segura y feliz.
Solo les pido recuerden mi alegría y mi amistad. Con amor Sol”.

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