El Juzgado Penal de Quepos le metió seis meses de arresto domiciliario a un hotelero holandés de apellido Bodaan, que figura como sospechoso en el homicidio de la anestesióloga sancarleña María Luisa Cedeño Quesada, de 43 años.
De acuerdo con la oficina de prensa del Ministerio Público, el magnate extranjero deberá andar tobillera electrónica, tiene prohibido salir del país, deberá entregar el pasaporte y no puede tener contacto con los testigos del caso.
El europeo es dueño del hotel La Mansión Inn, donde asesinaron a puñaladas y golpes a Cedeño Quesada entre la noche del domingo 19 de julio y la madrugada del lunes 20 de julio.
A él lo atraparon en su vivienda, que se encuentra en la misma propiedad del centro turístico.
El personal de limpieza halló el cuerpo la tarde del lunes 20 de julio al llegar a hacer una revisión de rutina de la habitación.
La Fiscalía y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informaron que como parte del análisis de las pruebas hay un alto grado de probabilidad que el empresario estaría vinculado con los hechos. El número de expediente del caso es el 20-000723-072-PE.
El OIJ detuvo al stripper nicaragüense Teodoro Herrera Martínez, de 38 años, y a un ingeniero en sistemas tico de apellidos Miranda Izquierdo, de 36 años, como sospechosos de cometer del homicidio. Los dos cumplen seis meses de prisión preventiva, medida impuesta por el Juzgado Penal de Quepos.
Los detenidos son amigos cercanos de Bodaan e incluso a Herrera se le conoce por compartir en actividades sociales con el millonario.
Versiones preliminares apuntan que Miranda Izquierdo y Herrera Martínez se pusieron de acuerdo para matar a la doctora, quien era jefe del área de Anestesia del Hospital Cima, en Escazú.
La Policía Judicial también averigua si Herrera habría contactado a Cedeño y la habría convencido de hacer el viaje a través de engaños.
Las autoridades determinaron gracias al testimonio de varios de los empleados del lugar que la noche del domingo 19 de julio, la sancarleña pidió una botella de vino y dos copas en el restaurante y las subió a la habitación 21, donde se hospedaba.
Bodaan condenó el crimen en sus redes sociales un día después de que se dio a conocer.
El stripper vivió durante un año en La Mansión Inn sin pagar hospedaje, era un hombre de confianza del magnate y se daba una vida soñada en una de las zonas más paradisiacas del mundo.
El nicaragüense dormía en la habitación tres del complejo hotelero, mientras que Miranda Izquierdo llevaba un par de semanas haciendo teletrabajo cuando sucedió el asesinato.