El comandante de Puntarenas, Rigoberto Rodríguez Sojo, de 55 años, falleció delante de su esposa e hijos de la forma más insólita, la noche del martes.
El jefe policial, quien iba a cumplir tres años de estar a cargo de la delegación regional de la provincia, conducía su carro por la autopista Bernardo Soto (Alajuela – San Ramón) y justo cuando pasaba cerca de la planta de la Dos Pinos, en El Coyol de Alajuela, se le desprendió la barra estabilizadora y la cruz a un camión que iba delante.
Esa pieza pegó contra el parabrisas, lo traspasó y luego le dio en la frente al oficial, quien murió en el lugar.
Rodríguez Sojo disfrutaba de vacaciones con su familia.
La partida del comandante ha estremecido la Fuerza Pública. La institución lo recuerda como un funcionario ejemplar e impecable.