Carlos Andrés Carrillo Muñoz, de 36 años, cayó como sospechoso de repartir pornografía de menores por WhatsApp.
La Policía Internacional (Interpol) de Costa Rica lo capturó este jueves por la mañana, en las afueras de su casa, en El Rosario de Naranjo, Alajuela.
La investigación surgió a raíz de una alerta que recibieron los agentes de la oficina de San José, ubicada en el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), del Centro Nacional de Coordinación de Explotación Infantil en Canadá, sobre la difusión, a través de WhatsApp, de material de contenido sexual infantil que se subía y se descargaba desde Costa Rica.
Oficiales identificaron la dirección IP desde donde se conectaba Carrillo Muñoz para compartir los archivos de los menores.
Las autoridades escarbaron dos casas donde decomisaron computadoras portátiles, llaves mayas y teléfonos celulares.
