Dos gatilleros en moto apagaron a balazos a la joven promesa de fútbol playa Danny Hernández Abella, de 19 años, quien formó parte del alto rendimiento de Limón.
Al jugador lo atacaron la noche del jueves, pasadas las 9 p. m., según el informe del Ministerio de Seguridad, mientras caminaba junto con su amigo Jerickson Lindo Lewis, de 20 años, por una de las alamedas del barrio Pacuare Nuevo, en el centro de la provincia.
De acuerdo con un reporte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), los asesinos se les acercaron, el acompañante se bajó y le metió tres plomazos en el estómago a Hernández Abella, mientras que Lindo recibió uno en cada pierna.
A los muchachos los trasladaron de urgencia al hospital Tony Facio de Limón, donde horas después falleció Danny; a su amigo lo reportan fuera de peligro, pero no quiso dar ninguna declaración a los agentes sobre el motivo del ataque.
Las autoridades investigan el caso, pues hasta ahora se desconocen razones.
Ricardo Palmer, quien entrenó a Danny, lo recuerda como un guerrero en la cancha. En entrevista con ¡Qué Torta! relató que dio sus primeros pasos en el fútbol playa en un torneo intercolegial y luego se unió al alto rendimiento de Limón en el 2018.
Ese año salió campeón con el equipo y en el 2019 probó suerte en el fútbol sala. Palmer manifestó que en este 2020 se iba a incorporar de nuevo al alto rendimiento del fútbol playa.
Danny portaba la camiseta 14 y se desempeñaba en la posición de cierre en la cancha.