El caso del basquetbolista estadounidense Donnell Cooper II, DJ Cooper, tal vez es el más curioso en la historia de las pruebas antidoping que se aplican en los deportes de alta competencia a nivel mundial.
En el 2018 militaba en el equipo AS Mónaco Basket y debió entregar una muestra de orina a la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) para entrar en el equipo nacional de Bosnia-Herzegovina.
Lo más insólito del asunto es que las autoridades descubrieron una sustancia llamada HCG (gonatropina coriónica humana), una hormona producida por la placenta que determina que la persona está embarazada, es decir, el único organismo que tiene la capacidad de hacerlo es el de la mujer.
FIBA detectó el engaño de inmediato y suspendió por dos años a DJ Cooper de toda actividad por presentar la orina de una amiga.
El basquetbolista publicó un comunicado en el que atribuyó su retirada de las canchas de forma temporal por motivos familiares, algo que ni siquiera en su casa se lo creen.
DJ Cooper ha jugado con el PAOK, Panathinaikos, AEK Atenas y el mismo Mónaco. Espera regresar en el 2020.