El Departamento del Tesoro emitió una declaración en mayo del 2018 en la que confirmó, de acuerdo con investigaciones serias del Gobierno de Estados Unidos, que oficiales venezolanos utilizaron Venezolana de Aluminio (Venalum) y Aluminios Nacionales S. A (Alunasa, ubicada en San Juan Grande de Esparza) para lavar dinero, a través de Panamá, en Costa Rica y Rusia.
Estas operaciones fueron dirigidas por Diosdado Cabello, el hombre fuerte detrás del presidente de ese país sudamericano, Nicolás Maduro.
“A diciembre del 2016, los funcionarios venezolanos han utilizado empresas estatales, Venezolana de Aluminio (Venalum) y Aluminos Nacionales S.A. (Alunasa), para lavar dinero hacia Costa Rica y Rusia.
“El presidente de Venalum, así como otra persona que realmente dirigía la compañía, se dedicaba al tráfico de drogas y al lavado de dinero y usaba Venalum como cobertura para estas operaciones.
“Bajo la dirección de Rangel Gómez, en su calidad de gobernador del estado de Bolívar, Venalum utilizó botes para mover minerales y lavar dinero a través de Panamá hasta la sucursal costarricense de Alunasa.
“Cabello ordenó al Ejército venezolano que colocara a varios empleados de Alunasa en Costa Rica para supervisar la operación. Además, Cabello lavó dinero a través de Venalum hacia Rusia”, indica el comunicado oficial del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
Aunque ya ha pasado año y medio que se dio a conocer esta información recobró importancia esta semana en el país ante una serie de publicaciones del prestigioso medio español ABC, que reveló que el narcochavismo utilizó a Costa Rica para recibir pagos multimillonarios en dólares de un cartel mexicano.
Los reportajes destaparon que barcos que salían del puerto de Veracruz, México, hacían una parada técnica en Limón, lo que aprovechaban trabajadores de Alunasa para desalmacenar el dinero que llegaba oculto dentro de contenedores cargados con alimentos, que tenían como destino final La Guaira, en Venezuela.
Además, evidenciaron que Alunasa empaquetaba cocaína dentro de barras de aluminio que enviaba hacia la costa oeste de los Estados Unidos.
Todas estas versiones han sido desmentidas por la empresa venezolana en Costa Rica, que se ha visto acuerpada por el presidente, Carlos Alvarado Quesada, que ha dicho que esto se trata de una campaña de desprestigio.
Así mismo, el Banco Nacional de Costa Rica, que le cerró las cuentas a Alunasa en junio del 2018, se pronunció y negó categóricamente que se haya prestado para cualquier negocio ilícito de esa compañía.
Sin embargo, la posición oficial del país ha generado dudas, porque se refieren a la actualidad, cuando estas operaciones se empezaron a detectar por las autoridades estadounidenses a finales del 2016.