¿Quién dijo que los combustibles no se verían afectados por el impuesto al valor agregado (IVA)?
Para el que no quiere caldo, pues le recetan dos tazas. Los consumidores no tendrán más remedio que soltar ¢7,5 más por litro en la súper, en la Plus 91 o en el diésel.
No hay quite. A pesar de que el Ministerio de Hacienda determinó que el producto en sí no debe pagar el 13%, hay otras variables que sí y eso repercutirá en el precio final.
A los servicios de transporte de combustibles y a la ganancia que obtienen las estaciones de servicio con la venta del producto sí se les aplica el 13%. Por esta razón, los combustibles saldrán más caros.
Vale aprovechar la ocasión para explicar que un 39% del precio que se paga por los combustibles equivale al impuesto único. En la siguiente tabla se aprecia la distribución.
Además, hay una solicitud de aumento pendiente por parte de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) en la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
La institución la presentó el pasado 12 de julio y es probable que se aplique la última semana de julio o la primera de agosto.
Recope pidió ¢31 más por litro de súper, ¢26 más en la Plus 91 y ¢14 más en el diésel.
Los precios cambiarían de la siguiente forma con esa alza:
Súper: de ¢659 a ¢690
Plus 91: de ¢638 a ¢664
Diésel: de ¢527 a ¢541