El efecto de las visitas del presidente, Carlos Alvarado Quesada, lamentablemente ha disminuido los tiempos de respuesta.
El mandatario cuenta con un récord perfecto: de tres, tres. Visita que hace a alguna compañía o a algún país y se vienen los despidos.
La más reciente noticia ha tomado, de nuevo, a todos por sorpresa. Mientras Alvarado se encuentra en Alemania, la empresa textilera alemana Amoena anunció que cerrará operaciones en el país y esto significa que más de 200 personas se quedarán sin trabajo.
La primera marca del presidente llegó con el anuncio de Intel, el 27 de marzo anterior, del cierre del departamento de Tecnologías de Información, que afectó al menos a 70 personas.
Tan solo dos semanas antes (el 13 de marzo), Alvarado se reunió con encargados de la compañía durante una gira por Estados Unidos en la que anunció mejores condiciones en el país para el gigante tecnológico.
El segundo golpe llegó el 6 de mayo. Ese día Sykes informó del recorte de cientos de puestos, tan solo semana y media después de que el mandatario había participado de una actividad en la sede de la transnacional en San Pedro de Montes de Oca.
Y ahora se une Amoena.
“La empresa tomó la decisión debido a cambios sustanciales en las pautas del mercado y giros de negocios en los últimos años; especialmente, la proveeduría de textiles y otros materiales para productos de uso íntimo, que se han trasladado principalmente a Asia. Con miras a un crecimiento sostenible, Amoena informó que requiere acercarse a los mercados proveedores en Asia y los mercados consumidores en Europa”, indicó la Coalición de Iniciativas para el Desarrollo (Cinde).