La transición a la época lluviosa ha hecho que el nivel de los ríos en el Gran Área Metropolitana (GAM)deje de disminuir, lo que significa que las fuentes de agua se están estabilizando, dio a conocer el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA). Esto se detectó en el monitoreo diario que realiza el AyA.
Datos del AyA indican que el agua que se obtiene de fuentes superficiales se redujo un 85% en 2024 como consecuencia de la sequía que causó el Fenómeno de El Niño. Por ejemplo, la quebrada Milagro, de donde sale agua para Guadalupe, bajó su caudal en un 76% y el río Tiribí había perdido el 37% de su caudal con el que alimenta la Planta Potabilizadora de Tres Ríos.
“Este verano ha sido sin precedentes y ha impactado fuertemente los caudales de las fuentes de agua potable. Gracias a la incorporación acelerada de nuevas fuentes, las maniobras que hemos realizado de pasar agua entre sistemas y la entrada de las lluvias, esperamos superar pronto este verano tan seco”, expreso Juan Manuel Quesada, presidente del AyA.
El pasado martes 23 de abril Quesada declaró “esperamos que a finales de mayo ya nosotros tengamos los sistemas estabilizados, tengamos un poco más de agua de lluvia y la gente pueda contar con muchísima más agua en sus sistemas”. La institución tiene programado terminar con los racionamientos en la GAM cuando se estabilice el sistema.
Sin embargo, algunas zonas todavía tendrán problemas de abastecimiento después de mayo. Alejandro Calderón, subgerente gestión de sistemas del GAM, dijo que entre estos lugares están San Francisco de Coronado, las zonas altas de Alajuelita, fundamentalmente Concepción y San Juan de Dios de Desamparados.